Un japonés de 57 años se da cuenta de que empieza a desaparecerle comida de la nevera, intrigado por este echo decide instalar una cámara de seguridad en su casa. No tardan en aparecer los supuestos “ratones”, se trata de una mujer que aparece paseándose por el domicilio del señor en su ausencia. El japonés llama seguidamente a la policía, quienes ponen en marcha una operación en la que se registra la casa “Registramos la vivienda y descubrimos a la mujer instalada en un armario”, eso explica un portavoz de la policía de Fukuoka.
Al parecer esta mujer, Tatsuko Horikawa de 58 años, vivía escondida en la parte superior de un armario, lo suficientemente grande para albergar a una persona tumbada, donde había instalado un colchón y varias botellas de agua. La mujer "explicó a los investigadores que no tenía donde vivir. Parece que vivió aquí durante un año, aunque no todo el tiempo", declaró el portavoz.
La mujer fue detenida y la policía sospecha que pudo haber instalado escondrijos en los armarios de otras viviendas del barrio.
Al parecer esta mujer, Tatsuko Horikawa de 58 años, vivía escondida en la parte superior de un armario, lo suficientemente grande para albergar a una persona tumbada, donde había instalado un colchón y varias botellas de agua. La mujer "explicó a los investigadores que no tenía donde vivir. Parece que vivió aquí durante un año, aunque no todo el tiempo", declaró el portavoz.
La mujer fue detenida y la policía sospecha que pudo haber instalado escondrijos en los armarios de otras viviendas del barrio.
5 comentarios:
Quién lo diría... Pues nada, voy a tener que colarme en el armario de algún capullo, pero no para comer, sino para tenderle alguna trampa :D
Veis como no era tontería lo que decía la ministra de Vivienda sobre los pisos de protección oficial de 30 metros cuadrados.. ¡¡si es que hasta en menos se puede vivir!!
Oí o leí este caso precisamente hace unos días... pero ya no recuerdo dónde... quizá aquí... qué memoria!!
Enfin, que hay gente a la que se le va la olla, y si no se les va, es que tienen un morro que se lo pisan.
He visto un documental sobre el síndrome de Diógenes, puede que dentro de poco veas un post relacionado.
besets
No me digáis que no se puede hacer una buena historia con esto. En la realidad están las mejores historias, jeje.
Hombre para dormir está bien, pero no se le engarrotarian los huesos un puñao de estar ahí metida?
Yo me pregunto, el hombre este esque no habría el armario para cambiarse?? Y cuando lo habría no notaba olor a podrido? Porque vamos, un año allí dentro sin duxarse... a no ser que también usara su ducha.
Si, la historia empezaría así:
Hoy me he levantado y me he pegado un coscorrón... ;-p
Saludos!
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